El fabricante canadiense de teléfonos inteligentes BlackBerry anunció este viernes el despido de 4.500 empleados en todo el mundo, el 40% de su plantilla, dejando de manifiesto la aceleración de la caída de este ícono de la década del 2000.
La compañía, que anunció pérdidas en el segundo trimestre de su ejercicio fiscal por cerca de 1.000 millones de dólares, mantendrá a unos 7.000 empleados.
El grupo ya había suprimido algunos puestos de trabajo en los últimos meses en diversos sectores, aunque para la primavera (boreal) todavía tenía 12.700 empleados.
Ironía de la historia: el anuncio de los despidos masivos se produjo el mismo día en que largas colas se extendían frente a las tiendas para el lanzamiento del nuevo iPhone de Apple.
Precursora del mercado de los teléfonos inteligentes, BlackBerry se encuentra en continua caída desde hace al menos tres años, y en 2012 ya se había visto obligada a despedir a 5.000 empleados en todo el mundo.
Las dificultades del grupo para vender sus teléfonos son la causa de este desastre. BlackBerry dijo el viernes que las ventas de su nuevo Z10, con el que pretendía relanzarse en el mercado, no lograron sus objetivos.
Si bien los resultados serán publicados en una semana, la compañía estima que se vendieron 3,7 millones de aparatos en el segundo trimestre, pero sobre todo antiguos modelos BB7.
La empresa reducirá su cartera de productos de seis a cuatro dispositivos, según un comunicado del grupo emitido tras las suspensión de la acción en las plazas bursátiles de Toronto y Nueva York.
BlackBerry informó que espera pérdidas de entre 950 y 995 millones de dólares en el segundo trimestre de su ejercicio fiscal por amortizaciones vinculadas a las pobres ventas de su teléfono inteligente Z10.
Para hacer frente a las dificultades y sobre todo a la falta de ventas, el fabricante pasó una provisión de cargas excepcionales del orden de 930 a 960 millones de dólares, “principalmente debido a los dispositivos Z10″.