SANTO DOMINGO.- En una manifestación abierta de “estafa y abuso de confianza”, la Cooperativa Nacional de Servicios Múltiples de los Maestros (COOPNAMA) vuelve a colocarse en el centro de los cuestionamientos públicos, esta vez debido a la negativa de sus principales directivos de entregar a sus socios los excedentes por ganancias netas, generados por las actividades realizadas por los más de 120 mil afiliados.
El método utilizado por los directivos de COOPNAMA es el de recapitalizar dichos excedentes, que del 2007 al 2011 alcanzaron la suma de 113 mil 400 millones de pesos, dinero que en lugar de ser entregado a los socios, se les presta a la tasa vigente en el mercado, un 24 por ciento anual, es decir, a un dos por ciento de interés mensual.
El mecanismo de recapitalización es el de traspasar estos excedentes que pertenecen a los socios a un denominado capítulo de cuentas de aportaciones, que según la Ley 127-64 sobre Cooperativismo, solamente pueden ser retirados por muerte o renuncia del socio.
Los profesores Miguel Martínez y Félix Rodríguez, quienes hacen la denuncia y en la actualidad recolectan firmas de los afiliados de esta cooperativa a fin de que se cumpla con lo establecido por la ley y los reglamentos de la entidad, refieren que la respuesta “infeliz” de los ejecutivos de COOPNAMA es que de cumplirse con lo previsto en la ley, entonces se descapitalizaría la cooperativa.
Los profesores Martínez y Rodríguez explicaron que de los 113 mil 400 millones de pesos de ganancias netas del período 2007-2011, solo fueron reportados mil 82 pesos, lo que implica un 31 por ciento en esos cinco años, cuando los estatutos dicen que las cooperativas deben retener un 21 por ciento y en este caso el porcentaje retenido es de un 69 por ciento.
Ante la negativa de los directivos de COOPNAMA a ofrecer explicaciones, los afiliados han solicitado, mediante actos de alguacil números 621 del 28 de mayo; 490, del diez de junio y 722 del cinco de agosto de este 2013, la entrega de los excedentes mencionados o de lo contrario procederán al sometimiento por ante los tribunales de la República por estafa y abuso de confianza, según lo establecen los artículos 405 y 408 del Código Penal.
IDECOOP, el gran ausente en el conflicto
Como debería ocurrir de manera natural, pues la legislación vigente faculta al Instituto de Desarrollo y Crédito Cooperativo a intervenir en este problema que afecta a miles de socios de COOPNAMA, éstos han tratado de reunirse infructuosamente con el director ejecutivo del IDECOOP, Pedro Corporán.
Los profesores manifiestan que ante la dificultad de reunirse con el omnipotente Corporán, tuvieron que conformarse con una entrevista con dos técnicos de la entidad gubernamental, quienes les manifestaron la imposibilidad de enfrentar a ese “monstruo” llamado COOPNAMA, en tanto, ya llevan dos meses de espera a que el todopoderoso jefe del IDECOOP se digne recibirles para escuchar sus alegatos.
Los trámites para la reunión con el director ejecutivo Corporán, se hizo por los métodos tradicionales, una comunicación de fecha 7 de mayo del año en curso, en la que le exponen los motivos por los que exigen el cumplimiento de lo que establecen la Ley 127-64 sobre Asociaciones Cooperativas, del Reglamento 623-86 y los estatutos de la COOPNAMA, sin que hasta la fecha haya habido contestación alguna.
A este respecto, indican que el Artículo 43 del reglamento 623-86 para la aplicación de la ley antes mencionada, expresa que:”Ninguna cooperativa efectuará distribución de excedentes en efectivo durante sus primeros cinco años de operaciones destinándose la totalidad de los mismos a aumentar el capital de la cooperativa” y COOPNAMA lleva ya 42 años funcionando sin que sus socios vean los beneficios.
La “estafa” de COOPNAMA a sus afiliados hace presumir a los maestros denunciantes, que la dirigencia del organismo conformada por el presidente del Consejo, Valentín Medrano Pérez, el gerente general, Antonio Domínguez, el presidente del Consejo de Vigilancia y el presidente del Comité de Créditos, Roberto Núñez y Juan Bautista Báez, conformarían una especie de contubernio para beneficiarse de los recursos que pertenecen a los socios de la cooperativa, indicando que estas personas actúan amparados en su filiación al partido de Gobierno.
Manifiestan además, que las informaciones no llegan a los 288 distritos cooperativos, que son los encargados de reproducirlas a los 120 mil socios, tal y como lo establecen los reglamentos y estatutos de esta cooperativa. Martínez y Rodríguez aclaran que son maestros independientes, no vinculados a ninguna corriente política de la COOPNAMA, en la ocasión liderada por dirigentes del Partido de la Liberación Dominicana.
Lo cierto es que la actuación del Consejo Directivo de la COOPNAMA se debe principalmente, a que la mayoría de los socios no conocen los estatutos, mucho menos la ley y el reglamento, por lo que este consejo baila a sus anchas en un festín que no deja fuera del escenario a un Comité de Vigilancia, que al parecer, no vigila nada.
