Independencia.-En lo que forma parte de la solución a un viejo reclamo de la comunidad Boca de Cachón, Jimaní, el presidente Danilo Medina dio hoy el primer palazo para la construcción de un complejo habitacional de 537 viviendas que beneficiarán a unas tres mil familias afectadas por la crecida del Lago Enriquillo, con una inversión de 744 millones 588 mil 765 pesos.
La actividad inició a las 9:50 de la mañana con la llegada del primer mandatario.
En el acto, el ministro Administrativo de la Presidencia, José Ramón Peralta, proclamó que desde el primer momento, el presidente Medina tomó la decisión de dar una solución integral a los diferentes retos que enfrentaban las comunidades y una respuesta definitiva que terminará de una vez y por todas, con la incertidumbre de miles de familias.
Peralta explicó que durante mucho tiempo las demarcaciones de esta región, han estado expuestas a las inclemencias climáticas y padeciendo año tras año las crecidas de las aguas del Lago Enriquillo.
Refirió que la rehabilitación de esta zona y el apoyo a sus habitantes, ha sido una prioridad desde que el presidente Medina eligió las comunidades del entorno del Lago, como destino para su segunda visita sorpresa en octubre del año 2012.
“La primera medida que se ha tomado como parte de ese plan integral, es garantizar que ninguna comunidad pierda su medio de vida como consecuencia de las crecidas del afluente”, significó el ministro Administrativo de la Presidencia.
Reveló que en total, el Gobierno incorporará a la producción 66 mil 487 tareas para beneficiar directamente a mil 907 campesinos.
Al continuar con los detalles del proyecto de Boca de Cachón, el funcionario explicó que se impulsará la creación de cooperativas para dar facilidades y soluciones, y de ese modo, mejorar la productividad y los ingresos de los productores de esta demarcación.
“El tercer gran proyecto que hemos puesto en marcha y quizás el más emblemático, es el que nos reúne hoy, y que dará una respuesta definitiva a las precariedades que vive el pueblo de Boca de Cachón. El presidente ha querido que lo que durante años, ha sido un símbolo de la vulnerabilidad, en pocos meses se convierta en un pueblo modelo, de orden y sostenibilidad para toda la República Dominicana”, precisó el ministro Administrativo de la Presidencia.
El proyecto, concebido para dignificar la vida de los habitantes de esta zona, será construido por ingenieros y arquitectos de las Fuerzas Armadas y con un concepto de protección ambiental que contará con escuela, liceo politécnico, área de mercado, centro comercial, clínica de atención primaria, un cementerio, un asilo, planta de tratamiento de aguas residuales y todo un sistema que permitirá a los moradores en el entorno de sus propias viviendas, producir hortalizas y bienes agrícolas.
Contará también, con un bosque con especies de árboles frutales y una avenida circunvalación con todo el criterio de las ciudades modernas. Esta información la ofreció el mayor general Rafael de Luna Pichirilo, director de Comunidades Fronterizas.
La bendición estuvo a cargo del padre Toribio García Lora, de la parroquia San José de Jimaní, quien pidió a Dios bendecir esta iniciativa, que definió como un proyecto de amor que Boca de Cachón recibía con beneplácito.
Estuvieron presentes los ministros de Obras Públicas, Gonzalo Castillo; de las Fuerzas Armadas, almirante Sigfrido Pared Pérez; de Agricultura, Luis Ramón Rodríguez; así como el director del Instituto Agrario Dominicano, Radhamés Valenzuela, del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados, Alberto Holguín y el gobernador de la provincia Independencia, Vianney Medina, entre otros.
Tanto el director del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, Olgo Fernández como el del INAPA, Holguín, explicaron la magnitud de los trabajos que se están haciendo en sus áreas en el proyecto de Boca de Cachón y en otros lugares de esta comunidad.
En ese sentido, citaron la construcción de pozos, dragados de terrenos, sistema de riego por bombeo y otras realizaciones que han formado parte de promesas hechas por el jefe del Estado.
De acuerdo con investigaciones, desde el año 2000 y hasta el 2011, el Lago Enriquillo provocó inundaciones que afectaron un total de dieciséis mil hectáreas, produciendo así el desplazamiento y pérdidas en viviendas y agricultura, a lo que hoy el Gobierno empieza a dar solución.