
La cerdita con cara de gente que nació en esta comunidad, no murió de muerte natural, sino envenenada por uno de sus dueños, para evitar “una matazón”, ya que todos señalaban a un vecino como el padre de la criatura.La envenenaron con tres pasitos, según cuentan, en la misma leche que le suministraban en biberón, porque la madre la rechazaba, es decir, se negaba a amantarla, tal como hizo con sus otros siete hijos.Así lo confiaron vecinos de JJiménez,...