Fidel y Juan Pablo II en La Habana. Foto: AP
El papa Juan Pablo II contó al actual Secretario de Estado, el cardenal Tarcisio Bertone, que Fidel Castro fue tal vez el presidente que se preparó más a fondo, más concienzudamente, para recibirle.
Bertone lo cuenta en su libro “Un cuore grande, Omaggio a Giovanni Paolo II” (Un gran corazón. Homenaje a Juan Pablo II), editado por la Librería Vaticana, que saldrá a la venta próximamente.
Con este libro, del que hoy adelanta unos capítulos el diario vaticano “L’Osservatore Romano”, el purpurado homenajea al papa Wojtyla con motivo de su beatificación, el próximo 1 de mayo,
Juan Pablo II visitó Cuba entre el 21 y el 25 de enero de 1998, en un viaje histórico, en el que recorrió la isla y se entrevistó con Fidel Castro.
“Fidel Castro mostró afecto por el papa, que ya estaba enfermo, y Juan Pablo II me confió que posiblemente ningún jefe de Estado se había preparado tan a fondo para una visita de un Pontífice”, recuerda Bertone en su libro.
Fidel, prosigue Bertone, había leído las encíclicas y los principales discursos de Juan Pablo II e incluso algunas poesías.
(Con información de EFE)
El papa Juan Pablo II contó al actual Secretario de Estado, el cardenal Tarcisio Bertone, que Fidel Castro fue tal vez el presidente que se preparó más a fondo, más concienzudamente, para recibirle.
Bertone lo cuenta en su libro “Un cuore grande, Omaggio a Giovanni Paolo II” (Un gran corazón. Homenaje a Juan Pablo II), editado por la Librería Vaticana, que saldrá a la venta próximamente.
Con este libro, del que hoy adelanta unos capítulos el diario vaticano “L’Osservatore Romano”, el purpurado homenajea al papa Wojtyla con motivo de su beatificación, el próximo 1 de mayo,
Juan Pablo II visitó Cuba entre el 21 y el 25 de enero de 1998, en un viaje histórico, en el que recorrió la isla y se entrevistó con Fidel Castro.
“Fidel Castro mostró afecto por el papa, que ya estaba enfermo, y Juan Pablo II me confió que posiblemente ningún jefe de Estado se había preparado tan a fondo para una visita de un Pontífice”, recuerda Bertone en su libro.
Fidel, prosigue Bertone, había leído las encíclicas y los principales discursos de Juan Pablo II e incluso algunas poesías.
(Con información de EFE)