En momentos que se acrecientan los rumores acerca de una inminente intervención militar estadounidense contra el régimen libio de Moamar Gadafi, el ministro de Defensa de Italia, Roberto Maroni, afirmó esta semana que debía mantenerse la calma ante una crisis que, según él, podía desembocar en una Tercera Guerra Mundial.
“Una acción militar, en particular por parte de los Estados Unidos, puede dar lugar a que los otros Estados árabes formen una coalición, y las consecuencias serían devastadoras”, advirtió Maroni en una entrevista que difundió el diario italiano La Padania.
Sus declaraciones se dieron el miércoles 9, horas antes de que las fuerzas leales al líder libio Moamar Gadafi atacaran con artillería a los rebeldes en por lo menos dos grandes ciudades, mataron a varias personas e hicieron impacto en un oleoducto y un depósito petrolífero.
Gadafi parecía mantener la iniciativa que tomó en los últimos días en su lucha contra los rebeldes que tratan de avanzar sobre la capital, Trípoli, desde los territorios que conquistaron en el este de Libia.
Asesores del presidente Barack Obama se reunieron el mismo miércoles en la Casa Blanca para analizar las consecuencias de imponer una zona de exclusión aérea sobre Libia y otras alternativas militares, aunque la decisión final dependerá de Obama, dijeron los funcionarios, que hablaron a condición del anonimato por tratarse de asuntos internos del gobierno.
De hecho, el vocero de la Casa Blanca, Jay Carney, informó el miércoles 9 que el encuentro no derivaría en una decisión inmediata sobre si Estados Unidos debería intervenir más en Libia.
El peligro
En Roma, el ministro de Defensa italiano manifestó que es mejor insistir en la presión diplomática contra Gadafi para que deje de bombardear a su pueblo, aunque se negó a decir explícitamente si la solución era la salida del poder del dictador.
Maroni sugirió que la mejor opción sería una especie de Plan Marshall “en el que Europa tendría un papel importantísimo”, todo ello junto a “una fuerte acción diplomática, también europea”.
El Plan Marshall fue una iniciativa de los Estados Unidos al término de la segunda Guerra Mundial (1945) y que permitió la reconstrucción económica de Europa.
Exclusión aérea
En la reunión de la Casa Blanca se barajaba la posibilidad de establecer una zona de exclusión aérea total o parcial en Libia, a través de la cual Estados Unidos o sus aliados volarán aviones de guerra para impedir que Gadafi bombardee a los civiles. Otra posibilidad es lanzar ataques selectivos con aviones o misiles.
Gadafi sostuvo el mismo miércoles que una zona de exclusión aérea hará que Libia considere que el objetivo de las fuerzas extranjeras es hacerse con el petróleo y privarles de libertad.
Si así fuera, advirtió, el líder libio, “el pueblo empuñará las armas y luchará”. Pero algunos consideran que también podría conseguir el apoyo de parte de las naciones árabes.